A raíz de la modificación del texto tradicional del homenaje a los que dieron su vida por España, redactado y leído el día de la Fiesta Nacional del 12 de octubre de 2004, me veo en la obligación moral de redactar el original, para que no se perviertan los valores que lo inspiraron, con la vana excusa de contentar a los que ni sienten la patria ni la defienden y sólo pretenden hacer prevalecer sus intereses particulares o los de colectivos sectarios o partidistas.
"Lo demandó el honor y obedecieron,
lo requirió el deber y lo acataron.
Con su sangre la empresa rubricaron,
con su esfuerzo la Patria redimieron.
Fueron grandes y fuertes,
porque fueron fieles al juramento que empeñaron.
Por eso como valientes lucharon y como héroes murieron.
Por la patria morir fue su destino.
Querer a España, su pasión eterna,
servir en los Ejércitos su vocación y sino.
No quisieron servir a otra bandera,
no quisieron andar otro camino,
no supieron morir de otra manera".
Los cambios que se han realizado son:
Donde el discurso afirmaba que "no quisieron servir a otra bandera" se dirá "no pudieron servir con más grandeza", y donde se decía "no supieron morir de otra manera" se afirmará que "no supieron vivir de otra manera".
Modificaciones que envilecen el discurso, pues las distintas banderas de España han sido honradas en todas las épocas, y "servir con grandeza" carece de la significación castrense de "honor", "sacrificio", y "humildad", más que "grandeza", un término totalmente descolocado.
No poder servir con más grandeza también expresa una incapacidad manifiesta por la expresión "no pudieron servir ...", en contraposición a "no quisieron ...", que expresa libertad y gallardía.
En cuanto al "no supieron vivir de otra manera", me parece esperpéntico, pues niega la principal función del militar: el sacrificio individual para salvar al colectivo.
No saber morir de otra manera indica nobleza y valores raciales. No saber vivir de otra manera expresa apatía, comodidad, ignorancia. Y lo que es peor, niega el principal motivo por el que un soldado se diferencia de un mercenario: los ideales.
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